Prevención ante la desigualdad de género. Nuevos campos profesionales para el trabajo social

Resumen

El Trabajo Social es una profesión de cambio y adaptación constante a la realidad social. La sociedad transforma sus estándares haciendo que surjan nuevas situaciones que requieren nuevas formas de actuación. Ante ello, al Trabajo Social se le abren nuevos espacios profesionales. Uno de ellos es el relativo a la desigualdad entre géneros. La brecha salarial, los techos de cristal, la feminización o masculinización de algunas profesiones, la cosificación y sexualización social de la mujer o la violencia de género son ejemplos de las realidades sobre las que se necesita seguir trabajando. Todas tienen una raíz común: las desigualdades en base al género. Para ello existe una doble línea de actuación: 1. Acción preventiva 2. Acción de Restauración. La primera, tiene el objetivo de intentar que no se den situaciones no deseadas. Para la acción restaurativa su objetivo es que una vez dada la situación no deseada, volver al contexto inicial a través de una intervención social por medio de la metodología del Trabajo Social. Es en la faceta preventiva, desde la perspectiva de intervención socioeducativa, en la que nos situamos como transformadores de estructuras que desarrollan situaciones de desigualdad. Para ello, es preciso entender la desigualdad entre géneros como ejemplo de un sistema de estratificación social que impide desarrollarse a los sujetos con libertad y avanzar hasta el máximo de sus capacidades. Con ello, en la presente comunicación se van a desarrollar los aspectos claves de las distintas tipologías de prevención en relación con la desigualdad de género.